La historia de este lomito se ha vuelto un tema de conversación, pero sus rescatistas claman por ayuda para salvarlo. Amigo busca un hogar desde hace dos años.
La adopción de mascotas es una labor que numerosas asociaciones y rescatistas independientes realizan con gran amor. Sin embargo, no siempre es sencillo encontrar un lugar seguro para los animalitos, y en esta ocasión, ‘Amigo’ corre un grave peligro.
La historia de ‘Amigo’
La historia de ‘Amigo’ no ha sido fácil; desde temprana edad ha conocido el lado oscuro del ser humano: la indiferencia, el maltrato, el hambre y ahora la posibilidad de la muerte. Este lomito está en busca de un hogar que le demuestre que hay personas de buen corazón dispuestas a ayudarlo.
‘Amigo’ fue rescatado hace dos años por Ale Durisotti, quien lo encontró por azares del destino mientras trabajaba. Desde entonces, se hizo cargo de buscarle un espacio temporal que pudiera acogerlo. Amigo es un perro de carácter noble, juguetón y sociable.
La situación actual de ‘Amigo’
Tras ser rescatado, ‘Amigo’ llegó a manos de una etóloga (de quien se solicitó resguardar su identidad), quien se ha hecho cargo de él desde ese momento. Sin embargo, a pesar de su nobleza, ‘Amigo’ no ha tenido suerte para encontrar una familia.
La mujer que recibió a ‘Amigo’ percibía un pago mensual de 6,000 pesos desde hace dos años para cubrir los gastos de este canino, sin entregar ningún tipo de comprobante sobre el uso de dicho recurso. Sin embargo, Ale ya no tiene la posibilidad de costear esta cantidad, por lo que el acuerdo con la etóloga llegó a su fin.
El peligro que enfrenta ‘Amigo’
«Este año he estado sin trabajo, no he podido pagar mi renta, y el mes pasado fue el último mes que pude pagarle a ella, juntando peso por peso. No tengo de dónde sacar. Dos veces llevé gente para conocer a Amigo, y esos días ella lo sacó sucio, botando tierra, y alteradísimo. Me dijeron: ‘ella no quiere porque 6,000 pesos es una renta'», cuenta Ale.
Con este panorama, la vida de ‘Amigo’ corre peligro, pues la etóloga contactó un refugio y le dijeron a Ale que lamentablemente el lugar está lleno. Le han sugerido la posibilidad de devolverlo a las calles o, peor aún, dormirlo.
«Me dijo que la opción más cruel es dejarlo nuevamente abandonado en la calle y que si no hay opción, hay que dormirlo, que ya tuvo 2 años de más o menos una casa. Yo volví a insistir en mi edificio para que me dejen tenerlo, pero no puedo. Estoy desesperada. Si vieras el tipazo que es… esos ojos», expresa Ale con la voz entrecortada y lágrimas en los ojos.
Un llamado a la solidaridad
Ale hace un llamado de solidaridad y un acto de amor para salvar a ‘Amigo’, ya que tampoco puede llevarlo a su casa debido a la prohibición de su casera. ‘Amigo’ no tiene mucho tiempo; necesita encontrar un hogar que se comprometa a cuidarlo el resto de su vida. Es un pitbull que convive bien con perros, niños y adultos; su único inconveniente es que no se lleva bien con los gatos. Según Ale, es un perro sumamente tranquilo.
Si deseas conocer a ‘Amigo’, puedes comunicarte al teléfono 55 3149 2350.