Una Decisión Controvertida Pascacio Taboada Cortina/Jorge Martínez CedilloCiudad de México;20 de noviembre de 2024 Una decisión polémica del Senado La…
Clara Luz Flores Carrales es una destacada política y abogada mexicana, originaria de Nuevo León, con una larga trayectoria en el servicio público y un firme compromiso con la seguridad, el bienestar social y la igualdad de género. A lo largo de su carrera, ha ocupado diversos cargos que la han posicionado como una de las voces más influyentes en la política mexicana. Ha sido reconocida por su labor en el fortalecimiento de la seguridad pública, impulsando iniciativas que buscan combatir la violencia y promover el desarrollo de las comunidades.
Entre los puestos más importantes que ha ejercido destacan:
Presidenta Municipal de General Escobedo, Nuevo León: Flores Carrales fue alcaldesa en tres periodos distintos (2009-2012, 2015-2018 y 2018-2021), destacándose por su enfoque en el combate al crimen organizado y el fortalecimiento de la seguridad ciudadana. Bajo su mandato, Escobedo fue reconocido a nivel nacional por la implementación de políticas innovadoras de seguridad que disminuyeron significativamente los índices delictivos en la región.
Diputada local y federal: A lo largo de su carrera legislativa, ha trabajado en la defensa de los derechos de las mujeres, reformas a la justicia penal y el impulso de proyectos de desarrollo económico. Además, ha sido una ferviente defensora de la igualdad de género, promoviendo leyes y programas que mejoren las condiciones de vida de las mujeres mexicanas.
Presidenta de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal: En este rol, Flores Carrales lideró esfuerzos para mejorar la coordinación entre los gobiernos municipales y estatales en materia de seguridad. Su gestión fue clave en la implementación de programas de prevención del delito y fortalecimiento de las instituciones policiales locales.
Clara Luz también ha sabido equilibrar su vida personal con su carrera política, destacándose como una madre y esposa comprometida, y orgullosamente ama de casa. Este equilibrio entre sus múltiples responsabilidades la ha convertido en un referente para las mujeres que buscan sobresalir en el ámbito público sin dejar de lado sus deberes familiares.
Orgullosamente ama de casa
Lo que debemos entender es que la paridad y la equidad, más allá de una cuestión de género, es un asunto de seres humanos con los mismos derechos.
Una nueva era en la presidencia
Con mucha elegancia y firmeza, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo ha demostrado en su primera semana de funciones, incluyendo las «mañaneras del pueblo», de qué está hecha la primera mujer en portar la banda presidencial en México. A través de sus acciones y su estilo de gobierno, Sheinbaum ha evidenciado una manera de pensar y de actuar congruente con sus principios, enseñando algunos de los dotes que caracterizarán su mandato.
Este cambio de época, simbolizado por la llegada de una mujer a la presidencia, va más allá del género. La paridad y la equidad son cuestiones de derechos humanos y potencialidades que todas y todos debemos asimilar. Debemos aportar lo mejor de nosotros para la construcción y evolución de nuestra patria.
Un momento clave en su primera semana como presidenta fue el 2 de octubre, cuando, en su primera conferencia de prensa matutina, el tema central fue la disculpa pública del Estado por los hechos de Tlatelolco en 1968. Al día siguiente, Sheinbaum abordó la importancia de una serie de cambios constitucionales, especialmente para dignificar y garantizar los derechos de las mujeres trabajadoras, un paso crucial hacia la equidad.
Respuesta a comentarios misóginos
Para cerrar la semana, Sheinbaum demostró una increíble destreza política al responder a un comentario machista del actor Rafael Inclán, quien hizo referencia a la figura de ama de casa de forma peyorativa. Con una respuesta puntual, la presidenta defendió a todas las mujeres que realizan esta importante labor:
“Lo que a mí me parece más lamentable es que se utilice la palabra ama de casa como algo peyorativo; no, yo soy presidenta, abuela, mamá y ama de casa, y con orgullo. Todas las amas de casa, es decir, mujeres, esposas que se dedican al hogar, merecen absolutamente todo nuestro reconocimiento, realizan un trabajo que nadie reconoce”, afirmó Sheinbaum.
Además, hizo hincapié en la importancia de las trabajadoras del hogar que dejan sus comunidades para apoyar en las ciudades, permitiendo que otras mujeres puedan salir a trabajar en diferentes actividades. Recordó que sus labores fueron reconocidas en el sexenio pasado, cuando se decretó que los patrones debían brindarles seguridad social.
Un orgullo compartido
Como diputada y servidora pública, y como una mujer que ha dedicado su vida profesional al bienestar del pueblo, cumpliendo a la vez con mis responsabilidades como mamá, esposa y ama de casa, aplaudo la postura de nuestra presidenta. Sheinbaum representa a todas las mujeres que, como la mayoría de las mexicanas, debemos desempeñar múltiples funciones al mismo tiempo.
México ha cambiado, y es importante que lo entendamos. No se trata solo de que una mujer haya llegado a la presidencia de México, sino de romper paradigmas, evolucionar y contribuir juntos y juntas a la construcción de un país cada vez mejor.
La opinión de los editorialistas es propia y no representa la opinión de la revista.
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