Señales de dolor en gatos que solemos pasar por alto
Compartir en Redes Sociales
Comparte en Redes Sociales
Mujer Informa 10/09/25
Los gatos son animales enigmáticos, independientes y muy reservados. Una de sus características más sorprendentes es la capacidad de ocultar el dolor, algo que puede complicar a sus tutoras y tutores la tarea de detectar a tiempo si algo anda mal.
A diferencia de los perros, los felinos rara vez muestran abiertamente su malestar, lo que hace que muchas señales pasen desapercibidas. Sin embargo, estar atentas puede marcar la diferencia entre un diagnóstico temprano y una enfermedad avanzada.
1. Cambios en la rutina diaria
Un gato que siente dolor suele modificar su comportamiento. Puede dormir más horas, perder interés en el juego o preferir el aislamiento. Este retiro no es simple “mal humor felino”, sino un mecanismo de autoprotección. Si notas que tu gato evita el contacto o se esconde con frecuencia, puede estar sufriendo.
2. Alteraciones en el apetito y la hidratación
El apetito es un espejo de la salud. Un gato que come menos, rechaza sus croquetas o bebe agua en exceso puede estar enviando señales claras de dolor o enfermedad. Problemas dentales, digestivos o renales suelen manifestarse de esta manera, por lo que es fundamental no pasar por alto estas variaciones.
Recibe las notas principales de Mujer Informa en tu celular, Únete a nuestro canal de Whatsapp y tendrás las noticias que te interesan en la palma de tu mano.
3. Movilidad limitada o posturas extrañas
El dolor físico en gatos suele reflejarse en su manera de moverse. Si evitan saltar, caminan rígidos, permanecen encorvados o adoptan posiciones poco habituales —como mantenerse encogidos por largos periodos—, puede tratarse de dolor articular, muscular o abdominal.
4. Descuidos en su higiene y apariencia del pelaje
Los felinos dedican gran parte del día a acicalarse. Cuando dejan de hacerlo o muestran zonas descuidadas en su pelaje, es una señal de alerta. El dolor, sobre todo en articulaciones, puede limitar su movilidad y hacer que reduzcan o abandonen el hábito de la limpieza.
5. Cambios en vocalizaciones y maullidos
El maullido es una de las formas más directas en las que un gato puede comunicarse. Si notas sonidos más graves, constantes, o gruñidos inusuales al cargarlos o acariciarlos, probablemente estén expresando incomodidad o dolor. Escuchar sus cambios de voz es tan importante como observar sus movimientos.
¿Qué hacer si detectas estas señales?
Si tu gato muestra uno o varios de estos síntomas, lo más recomendable es acudir de inmediato con una médica o médico veterinario. Jamás automediques a tu mascota: los medicamentos para humanos pueden ser peligrosos para ellos. Un diagnóstico temprano es clave para garantizar calidad de vida.
La sensibilidad y la observación son herramientas esenciales para el bienestar de tu gato. Entender su lenguaje corporal y emocional te permitirá responder a tiempo, cuidando de su salud y también fortaleciendo el vínculo que los une.
🐱✨ ¿Sabías que los gatos suelen ocultar el dolor? Aprende a detectar las señales que revelan su malestar en mujerinforma.com 💜